El gobierno de Gustavo Petro se suma a la lista de mandatos en los que el Estado intenta una salida negociada al conflicto armado con el Ejército de Liberación Nacional, Eln, una guerrilla que empezó en 1965 con la toma al casco urbano del municipio de Simacota, Santander, y que desde entonces ha mantenido una lucha en hostilidades en contra de la institucionalidad.
Después de 58 años, y del proceso que se había empezado durante el segundo periodo del expresidente Juan Manuel Santos en marzo de 2016, a partir de este lunes, negociadores del Gobierno y el Eln instalarán la mesa de diálogos en Caracas, Venezuela.
Según información del Gobierno, una vez se encuentren los equipos tanto del Eln como del Gobierno, empezarán a trabajar de inmediato en la discusión sobre los elementos claves; ya que protocolos como el de los países garantes del proceso aún faltan por ser definidos.
Por ahora las partes reconocen a Cuba y Noruega, pero se está a la espera de qué puede pasar con los ofrecimientos que han hecho España, Chile y Venezuela, y que, según el alto comisionado para la Paz, Danilo Rueda, su aceptación se tendrá que decidir de manera conjunta.
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Por parte del Gobierno, se sabe que en el equipo negociador están Otty Patiño y José Félix Lafaurie, que fueron confirmados por el propio presidente Petro. Patiño sería el jefe negociador del Estado colombiano con la guerrilla; este politólogo fue uno de los fundadores del desmovilizado M-19, integró la Asamblea Nacional Constituyente de 1991 y es uno de los hombres más cercanos al presidente.
Por su parte el presidente de Fedegán, José Félix Lafaurie, fue una de las sorpresas del equipo negociador, y quien ha tenido una relación de cercanía con el presidente Petro, del que era un férreo opositor. Lafaurie se la jugará en el tema de las tierras, una de las bases del conflicto que ha vivido Colombia.
Por parte del Gobierno también estarían los senadores Iván Cepeda y María José Pizarro, del Pacto Histórico, en la mesa de negociaciones.
Cepeda es quien ha hecho el contacto entre el Gobierno y Fedegan, y Pizarro celebró el respaldo de agencias de la ONU y la OEA a la ‘paz total’: “Implica abandonar la visión guerrerista para adoptar un enfoque de seguridad humana”. Además es hija del desmovilizado comandante del M-19, Carlos Pizarro, quien fue asesinado en 1990 siendo candidato presidencial.
El exsenador Jesús Alberto Castilla entraría también en la delegación del Gobierno, aportando su visión como dirigente campesino del Norte de Santander.
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Horacio Guerrero, un antropólogo quien ha tenido más de dos décadas de experiencia con la comunidad en la defensa de los Derechos Humanos, sería otro de los delegados del Ejecutivo para alcanzar la salida negociada al conflicto.
Por parte del Eln se destacan alias ‘Pablo Beltrán’ y ‘Aureliano Carbonell’. ‘Beltrán’ es el segundo al mando de la insurgencia, por detrás de ‘Antonio García’, y ‘Carbonell’ es miembro de la dirección nacional de la guerrilla.
'Silvana Guerrero’, ‘Consuelo Tapias’, ‘Isabel Torres’, ‘Óscar Serrano’ y ‘Viviana Henao’ también repetirán como interlocutores, después de la mesa instalada en febrero de 2017, en Quito, y suspendida desde agosto de 2018, cuando empezó el mandato de Iván Duque.
La primera tarea que tendría la mesa en cuanto a los acuerdos, sería alcanzar un cese multilateral al fuego con este grupo armado, a la vez que este que está enfrentado con las disidencias de las desmovilizadas Farc.
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